Defendamos Nuestras Fuentes de Vida! No a la Minería en la Cuenca Hidrográfica del Río San Juan.
Nos encontramos en un momento crucial para la provincia de San Juan y para toda la República Dominicana.
La cuenca hidrográfica del río San Juan, la columna vertebral de nuestra agricultura y el sustento de nuestras tierras fértiles, está amenazada por la empresa minera canadiense GoldQuest. Esta amenaza no solo es inaceptable, es un ataque directo a nuestra seguridad alimentaria y a nuestro futuro.
San Juan no es solo un pueblo agrícola; es el corazón de nuestra autosuficiencia alimentaria. Un gran porcentaje de los alimentos que se consumen en toda la República Dominicana proviene de nuestras tierras, alimentadas por las aguas puras que nacen en la cuenca hidrográfica del río San Juan.
La FAO ha declarado a nuestro país libre de hambre y soberanamente alimenticio, un estandarte de autosuficiencia que San Juan sostiene con orgullo. Además, la UNESCO nos ha reconocido como defensores de la biosfera, y nuestra provincia se erige como la «madre de las aguas».
El proyecto minero propuesto por GoldQuest es una amenaza directa a esta riqueza invaluable.
Los mineros prometen utilizar aguas lluvias para el procesamiento del oro, pero esta promesa es una falacia.
La realidad es que utilizarán las aguas del río San Juan, las mismas que alimentan la presa de Sabaneta.
Esta presa, crucial para nuestra región, está al borde de la desesperación, con solo el cincuenta por ciento de su capacidad de almacenamiento debido a una sequía persistente.
No permitiremos que nuestra tierra, nuestro agua y nuestro futuro se sacrifiquen en el altar de la codicia minera.
La minería trae consigo una serie de devastaciones ambientales: deforestación, contaminación de nuestras fuentes de agua, y destrucción irreversible de nuestros ecosistemas.
Las sustancias químicas tóxicas utilizadas en el proceso minero inevitablemente filtrarán y contaminarán nuestras aguas, poniendo en peligro nuestra salud y la de nuestras futuras generaciones.
Estamos en una encrucijada. Podemos elegir proteger lo que hemos construido con tanto esfuerzo y dedicación, o podemos permitir que la ambición desmedida de una empresa minera destruya nuestro legado.
La decisión es clara. Debemos alzar nuestras voces y decir un rotundo NO a la minería en la cuenca hidrográfica del río San Juan. Es nuestra responsabilidad defender nuestras fuentes de agua, proteger nuestra agricultura y garantizar un futuro en el que nuestras tierras sigan siendo fértiles y nuestras aguas puras.
Hacemos un llamado urgente a las autoridades, a la comunidad nacional e internacional, y a todos los defensores del medio ambiente: ¡no dejemos que GoldQuest ponga en peligro nuestra vida, nuestra tierra y nuestro futuro! Unamos nuestras fuerzas para asegurar que San Juan siga siendo el bastión de la producción agrícola y el símbolo de una nación que respeta y protege su patrimonio natural.
¡Defendamos San Juan! ¡Defendamos nuestra agua! ¡No a la minería!
[AUTOR: JOSE ENCARNACION]